Emilio Lozoya, exdirector de la paraestatal mexicana Pemex, será trasladado de
su actual reclusión en una cárcel de la sureña Málaga a otra de esta capital,
debido a cuestiones administrativas.
Las decisión fue tomada por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias a fin de que esté cerca de la Audiencia Nacional, encargada de su proceso de extradición solicitada por las autoridades mexicanas, informó un despacho de la agencia Europa Press.
La fecha del traslado no se ha determinado, pero sería en pocos días y lo más probable es que sea a Soto del Real, un centro de referencia de la Audiencia Nacional.
Lozoya fue detenido en la sureña Málaga el pasado miércoles 12 gracias a una orden internacional de detención librada por las autoridades mexicanas, a fin de que enfrente en su país un proceso por el delito de operaciones con recursos ilícitos.
En España tal delito equivale al de blanqueo de capitales y se castiga con una pena máxima de 15 años de prisión.
Los recursos ilícitos sumaron 10 millones de dólares provenientes de la constructora brasileña Odebrecht, en uno más de sus casos de corrupción en diversos países latinoamericanos.
A su regreso a México si es concedida la solicitud de extradición, también deberá enfrentar los cargos de delincuencia organizada y cohecho.
El exfuncionario mexicano ya desahogó su primera diligencia judicial, lo cual ocurrió el jueves 13, para lo cual se usó el procedimiento de videoconferencia, tras la cual el juez Ismael Moreno ordenó su ingreso provisional en prisión incondicional pues estimó que existe riesgo de fuga.
En Málaga se encuentra internado en el módulo cinco de la prision de Alhaurín de la Torre, destinado a quienes ingresan por primera vez a un centro de este tipo.
Las autoridades del centro carcelario han decidido aplicar las normas habituales de seguridad, y le destinaron una celda para el solo.
Cada celda del tipo en que se encuentra Lozoya es de unos nueve metros cuadrados, podría albergar a otra persona, sus instalaciones son de hormigón salvo la litera con dos camas, además de un lavabo, un inodoro y una mesita.
En Alhaurín de la Torre la rutina cotidiana empieza a las 8:30 horas con el desayuno e inicio de actividades que son optativas. A las 13:30 se les cita para la comida y la cena a las 19:30 horas, para una hora después regresar a las celdas.