
La situación económica de México al cierre de 2025 se define por una desaceleración económica y un entorno de alta incertidumbre, en el que la cautela en la política monetaria y los riesgos geopolíticos desempeñan un papel crucial; así lo expresó el doctor Héctor Iván del Toro Ríos, profesor e investigador del Departamento de Economía, del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la UdeG.
En rueda de prensa, Del Toro Ríos señaló que México cierra 2025 inmerso en una fase de crecimiento muy bajo o en estancamiento,presionado por la caída de la inversión y la actividad industrial; mientras que el Banco Central debe equilibrar la necesidad de estimular la economía en la lucha contra una inflación que se resiste a ceder y está en etapa creciente.
“El panorama económico en México nos llama a la prudencia. A pesar de la desaceleración del crecimiento del PIB, la inflación persiste como un desafío latente. Los esfuerzos del Banco de México y las medidas como el Paquete contra la Inflación y la Carestía buscan estabilizar los precios, por lo que confirman que el costo de vida, especialmente de los alimentos y servicios, sigue bajo la presión del alza de los precios, manteniendo el costo real de endeudamiento en niveles altos”, informó.
Recordó que las condiciones del aumento salarial en México para 2026 ya fueron definidas por la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, que determinó que a partir del 1 de enero el salario mínimo general se incremente de 278.80 a 315.04 pesos diarios.
