
Alcanzar la equidad de género en el espacio de trabajo todavía es un reto en México, si bien se han mostrado avances al respecto, la atención que las empresas han dado a los casos de discriminación laboral no ha sido suficiente.
De acuerdo con la encuesta “Percepción de equidad e igualdad en el trabajo 2025”, realizada por la compañía Apolo 25, el 37.2 % de las y los trabajadores encuestados aún perciben una brecha salarial entre hombres y mujeres, aun cuando se esté desempeñando el mismo rol. Al respecto se obtuvieron los siguientes resultados:
El 36.4% declararon ser testigos de conductas excluyeres o sexistas
31.8% experimentó discriminación por género, edad, origen o discapacidad
El 29.5 % presenció o sufrió acoso laboral o sexual
Ante esto en múltiples empresas, se han integrado mecanismos que permitan levantar denuncia ante las conductas sexistas y discriminatorias, sin embargo esto no ha garantizado un buen resultado en todos los casos:
El 34.2 de los casos reportados no fueron resueltos adecuadamente
E15.8% prefirió no denunciar porque desconfían de los procesos de su empresa para solucionarlo
El 28.9 de los encuestados prefirieron no responder
Solo el 21% de los encuestados confirmaron que sus denuncias fueron atendidas y resueltas correctamente
Por otro lado, ante los casos de discriminación y acoso, más del 60% de los participantes consideran que su empresa responde de manera efectiva, mientras que el 13.7 % considera lo contrario, evidenciando con ello que los protocolos para promover un entorno laboral más justo siguen siendo insuficientes.
¿Qué pueden hacer las empresas ante la brecha de género?
Para lograr un espacio de trabajo más equitativo, los colaboradores proponen mejorar la capacitación en diversidad e inclusión, al igual que implementar políticas claras contra el acoso laboral y revisar la equidad salarial en cada empresa.
Joselyn Castro, Líder del Proyecto Apolo Mujeres de Apolo 25 afirma que el cerrar la brecha salarial y construir empresas mas equitativas no solo es una cuestión de justicia, es una decisión estratégica de género, puesto que la equidad impulsa la innovación, fortalece la cultura organizacional y mejora la productividad.
De igual modo, aquellas compañías que defienden la igualdad obtienen mejores resultados en su aceptación al contribuir a generar un impacto social que no solo beneficie a sus trabajadores, sino a la imagen de la empresa misma.