
La rutina de hoy, fue distinta para el menor que se integró como elemento de las Fuerzas Armadas, compartió el pan y la sal en el desayuno con sus compañeros de la 22 zona en este municipio del Valle de Toluca.
Las actividades iniciaron muy temprano con el izamiento de la bandera, entonar el himno nacional, luego aprender algo del adiestramiento canino como conocer de primeros auxilios ante una emergencia de salud.
En la aventura, el pequeño se enfundó la emblemática ropa de la corporación, tuvo contacto con armas, además, de otras actividades habituales que hicieron una de sus mejores experiencias y algo inolvidable.
En todo momento, se mostró contento al igual que su familia, también subieron a un vehículo oficial para luego continuar con otras prácticas comunes entre la tropa qué hicieron un día especial para él.
Es un programa que la Secretaría de la Defensa Nacional implementó para qué niños con problemas de salud puedan convertirse en elementos de las fuerzas castrenses.
