
Representantes de mineras en México advirtieron de que el aumento de la incertidumbre económica causada por el cambio en la política comercial de Estados Unidos también genera expectativas de menor demanda, por lo que algunas pospusieron o limitaron sus planes de inversión.
Esa es una de las conclusiones de las encuestas realizadas para el reporte de economías regionales del Banco Central (Banxico) en el primer trimestre. Sin embargo, el subsector minero no petrolero creció luego de tres trimestres con caídas, según el instituto monetario.
“El subsector de minería de minerales metálicos y no metálicos creció luego de tres trimestres con caídas, en un contexto en el que las referencias internacionales de diversos metales aumentaron y en el que varias empresas mineras ampliaron o intensificaron sus operaciones”, señaló Banxico en el reporte.
Entre los factores comunes que apoyaron a la minería no petrolera en el primer trimestre de 2025, los ejecutivos consultados por el Banco Central en todas las regiones manifestaron que sus actividades se vieron favorecidas por el alza en las cotizaciones internacionales de los metales industriales y preciosos.
“Este incremento lo asociaron con un entorno global caracterizado por una elevada incertidumbre económica generada, en buena medida, por el cambio en la política comercial de Estados Unidos”, agregó.
En opinión de las fuentes consultadas, los precios del oro y la plata se elevaron al incrementarse su demanda como activos refugio. En el caso del cobre y las ferroaleaciones de manganeso, destacaron que la amenaza de nuevos aranceles provocó una demanda anticipada que presionó al alza sus cotizaciones.
El reporte resaltó que, tras un periodo prolongado de espera, se otorgaron permisos ambientales clave en el centro-norte, particularmente para plantas de procesamiento de residuos minerales, lo que permitió reactivar y ampliar operaciones.
Participantes del sector se han percatado de que, desde la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia, ha habido una mayor apertura de las autoridades hacia la industria, lo que ha ayudado a agilizar la entrega de permisos, sobre todo relacionados con temas ambientales.
En tanto, entre los factores comunes que perjudicaron a la minería no petrolera, las fuentes consultadas en todas las regiones citaron una mayor incertidumbre asociada con elementos tanto externos como internos.
“En cuanto a los externos, destacaron que las tensiones geopolíticas también limitaron algunos de sus planes de inversión. Entre los factores internos, mencionaron que la falta de definición sobre las reglas que se aplicarán a la actividad minera sigue siendo una limitante para el sector”, señaló Banxico en el reporte.
En particular, los ejecutivos entrevistados reiteraron su preocupación por las reformas relacionadas con el uso de agua, la protección de los suelos y la biodiversidad, al igual que la prohibición de la explotación de minas a cielo abierto y las negociaciones con ejidatarios.
Sin embargo, sobre la prohibición de la minería a cielo abierto, vale la pena resaltar que las autoridades mexicanas han señalado que tal no se implementaría, aunque sí esperan regularla.