
Ante señalamientos de Estados Unidos de robo y tráfico de hidrocarburos en México de parte del crimen organizado, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció este lunes una estrategia integral para combatir el robo de combustible —conocido como huachicol— tanto en su modalidad de extracción ilegal de ductos como en el contrabando de hidrocarburos que ingresan o salen del país de manera ilícita.
Durante su conferencia matutina, la mandataria informó que se han desplegado acciones coordinadas de inteligencia, fiscalización, vigilancia operativa e investigación penal, a través de una mesa de trabajo interinstitucional en la que participan la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), la Secretaría de Energía, Pemex Logística y otras dependencias federales.
Dicho grupo, precisó, sesiona semanalmente y da seguimiento a posibles anomalías en el sistema de distribución y comercialización de combustibles. “Cuando se detecta alguna irregularidad, se actúa de inmediato. Se trata de una coordinación constante entre áreas administrativas, operativas y de seguridad”, explicó.
La presidenta señaló que el esfuerzo se ha reforzado con la participación de las secretarías de Marina, Defensa Nacional, Seguridad y Protección Ciudadana, así como con la Agencia Nacional de Aduanas, particularmente para evitar la emisión irregular de permisos de importación y el tráfico de combustibles en puertos y cruces fronterizos.