
El gobierno mexicano demandaría a Elon Musk por la contaminación que producen los lanzamientos de cohetes en Starbase, el centro de operaciones de SpaceX ubicado en Texas, a solo 3 kilómetros de México. Los desechos y hasta parte de los cohetes llegaron a las costas del país latinoamericano, que enfrenta el problema de la microbasura espacial.
Este miércoles la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, informó que su gobierno podría denunciar al multimillonario estadounidense-sudafricano Elon Musk por la contaminación que generan los desechos provocados por el lanzamiento de cohetes de SpaceX, su empresa de fabricación y diseño de naves para viajes aeroespaciales situada en Texas, Estados Unidos.
Starbase, el centro de operaciones de SpaceX, se encuentra muy al sur estadounidense, cerca del estado de Tamaulipas, ubicado al noreste de México. Allí los grupos ambientalistas locales reclaman contra la contaminación de sus fuentes de agua a causa de los desechos producidos por los lanzamientos e, incluso, de restos de cohetes que ensucian la cercanía de sus viviendas.
Además, los grupos implicados en la defensa del medioambiente tanto en México como en Estados Unidos destacan que el proyecto espacial de Elon Musk atenta contra las tortugas marinas y las aves playeras de esa región. Los residuos que llegaron a las aguas mexicanas eran fragmentos de caucho, plástico, silicona, aluminio, tanques de enfriamiento y diversos envases. Los equipos de limpieza retiraron los compartimentos más grandes, pero el principal problema que enfrenta esa región de México es la microbasura espacial.
La zona afectada por estos lanzamientos incluye la Laguna Madre, un ecosistema de importancia internacional designado como sitio Ramsar, conocido por su riqueza en flora y fauna.
Un sitio Ramsar es un humedal designado como de importancia internacional bajo el Convenio de Ramsar. La Convención sobre Humedales, conocida como la Convención de Ramsar, es un tratado ambiental intergubernamental establecido en 1971 por la Unesco, que entró en vigor en 1975. Proporciona la base para la acción nacional y cooperación internacional con respecto a la conservación de humedales y el uso racional y sostenible de sus recursos. La Convención de Ramsar identifica humedales de importancia internacional, especialmente aquellos que proporcionan hábitat para aves acuáticas.
La Laguna Madre es hogar de especies en peligro de extinción como el manatí, la tortuga lora, tiburones y aves migratorias. Conservacionistas denuncian que la presencia de escombros en estas aguas constituye un verdadero ecocidio que podría tener consecuencias irreversibles si no se detiene de inmediato la actividad espacial sin regulación.