
México superó relativamente bien el peor escenario de aranceles, tras las nuevas políticas comerciales de Donald Trump, pero para mantener su atractivo de inversión es necesario corregir otros desafíos internos y estructurales, indicó Gerardo Carrillo, director regional para América Latina de finanzas públicas internacionales en Fitch Ratings.
“México sigue teniendo ventajas competitivas respecto a Estados Unidos, y en el tema arancelario, México no salió mal parado. Lo que vemos es que hay otras cuestiones que preocupan a los inversionistas”, dijo el analista en entrevista con El Sol de México.
Explicó que estos desafíos están asociados a problemas de inseguridad y oferta eléctrica para nuevos proyectos de infraestructura.
A su parecer la economía mexicana es atractiva para invertir debido a que los salarios son tres veces menores que en Estados Unidos, por la cercanía con otros países y porque no tiene tantas políticas arancelarias en comparación con otros países a los que impuso la administración de Donald Trump.
“Hasta hace tiempo se hablaba mucho de un nearshoring, pero evidentemente con todo lo que ha sucedido en Estados Unidos más bien parece que el actual presidente Trump está más interesado en hacer un reshoring (cuando una empresa vuelve a su país de origen)”, mencionó el analista de Fitch Ratings.
Desde su llegada a la presidencia el 20 de enero, Donald Trump ha mantenido en vilo al comercio exterior de México y Canadá anunciando aranceles del 25 por ciento a sus exportaciones, argumentando que ambos países no han frenado el flujo migratorio ni el narcotráfico hacia Estados Unidos.