
La activista sueca Greta Thunberg se embarcó desde Italia hacia la Franja de Gaza junto a otros once activistas internacionales. Su objetivo: denunciar el bloqueo israelí y visibilizar la grave crisis humanitaria que vive la población palestina.
¿Desde dónde salió y con quiénes viaja?
Zarpó desde Catania, en el sur de Italia, a bordo del velero Magdalena. La acompañan figuras como la eurodiputada franco-palestina Rima Hassan y el actor Liam Cunningham, conocido por su rol en Juego de Tronos. El viaje forma parte de una misión organizada por la Freedom Flotilla Coalition.
¿Qué busca esta misión?
El grupo quiere romper simbólicamente el bloqueo marítimo impuesto por Israel y llamar la atención mundial sobre lo que consideran una situación insostenible. Además, planean entregar ayuda humanitaria en el enclave.
¿Qué ha dicho Greta sobre este viaje?
En una frase que rápidamente se viralizó, Thunberg declaró: “Dejar de intentarlo sería perder nuestra humanidad”. Su participación busca aprovechar su visibilidad global para llevar el tema de Gaza a la agenda internacional.
¿Qué dice Israel sobre esto?
Las autoridades israelíes han respondido con firmeza. El Ejército israelí ya anunció que vigilarán el velero y que no permitirán el ingreso a Gaza por vía marítima, argumentando razones de seguridad.
¿Por qué esto importa?
Porque una figura como Greta Thunberg puede mover la conversación global. La situación en Gaza muchas veces queda fuera de la atención internacional, pero este tipo de acciones buscan recuperar visibilidad, generar presión y humanizar el conflicto.
¿Se ha hecho algo parecido antes?
Sí. En otras ocasiones, flotillas con ayuda humanitaria también intentaron llegar a Gaza y fueron interceptadas por Israel, generando tensión internacional. La diferencia ahora es el peso mediático de los activistas a bordo.