
La mejora en el ingreso de los trabajadores y el aumento en el universo de personas que tienen empleo impulsó a 9.5 millones de mexicanos a salir de la pobreza entre 2018 y 2024, una cifra que no tiene precedente para un periodo de seis años, reveló el Banco Mundial (BM).
En un reporte en que aborda la situación de la pobreza en el mundo, el organismo atribuyó la reducción de la pobreza en los últimos seis años en México a mejoras en el mercado laboral, una visión que coincide en parte con la planteada por el gobierno mexicano esta semana, que también incluyó la aportación de los programas sociales.
El BM, como hacen también las instancias gubernamentales y las entidades de evaluación, emplea varios parámetros para medir la pobreza.
En el reporte mencionado, el organismo multilateral sostiene que en 2018, al inicio de esta administración, 35.7 millones de personas, que representaban a 28.8 por ciento de la población (calculada para ese año en 124 millones) se encontraba en situación de pobreza, de acuerdo con sus mediciones para un país de ingreso medio, como México.
Para 2024, último año de la actual administración, proyecta que se encuentran en pobreza 26.1 millones de personas, que representan 20.2 por ciento de la población, calculada por el organismo en 129.4 millones de personas.
De acuerdo con la medición y proyecciones del Banco Mundial, entre 2018 y 2024 habrán dejado la pobreza 9 millones 574 mil personas, aun cuando en ese periodo la economía mexicana fue golpeada por el efecto de las medidas contra la pandemia, lo que provocó en 2020 una contracción del producto interno bruto de 8 por ciento.
La proporción de personas en pobreza en 2024 será menor en 8.6 puntos porcentuales a la registrada en 2018, al inicio de esta administración, cuando se ubicaba en 28.8 por ciento y representa una baja significativa respecto del pico alcanzado en 2020, cuando subió a 30.3 por ciento del total.
El BM sostuvo que los cambios en el mercado laboral impulsaron la reducción de la pobreza. Por una parte, el ingreso real per cápita, ajustado por el costo de la canasta alimentaria, creció 8.2 por ciento entre el cuarto trimestre de 2022 y el mismo periodo de 2023
