
El Instituto de Investigación y Fomento de las Artesanías del Estado de México (IIFAEM) descubrió un caso de corrupción en la pasada administración, donde se entregaron credenciales de maestros artesanos a personas que no tenían dicha calidad.
Agustín Herrera Pérez, director general del IIFAEM, denunció que alrededor del 20% de los registros en el padrón de artesanos podrían ser apócrifos, donde estas personas accedían a apoyos económicos, talleres y beneficios, incluyendo trámites de visas de trabajo, a pesar de no ser artesanos.
“La mayoría de los plásticos entregados recayeron en revendedores que compraban piezas de artesanos y las revendían en ferias artesanales, mientras que un porcentaje menor correspondió a personas sin relación con el sector artesanal, incluyendo burócratas y directores”, señaló.
Finalmente Herrera Pérez consideró grave esta situación, ya que afecta a los verdaderos artesanos que no reciben los beneficios merecidos, “la depuración del padrón de artesanos busca erradicar estas irregularidades y garantizar que los apoyos lleguen a quienes realmente los necesitan”.
